Nos quedamos la semana pasada con los reportes de ganancias de empresas y marcas que seguimos. En esta ocasión, Microsoft aprendió la lección de no dejar desatender segmentos del mercado que suele atender.
Ahora, antes que me dirán “¿no era Q1?”, recuerden que muchas empresas no se dejan llevar por año calendario, sino año fiscal, como en el caso de Microsoft.
En esta ocasión la gigante de Redmond reportó ingresos de $8.84 billones con ganancias de 5.7 billones post-impuestos y para dar métricas a los ingresos, esto es un bajón del 7% en comparación del este periodo en el 2016.
Lamentablemente, en el caso de los ingresos, la baja se dio por haber una baja del 24% con los ingresos que genera su hardware Surface en comparación del año pasado y puede que la pregunta inmediata sea, si tan mal le fue a la Microsoft Surface Studio y las nuevas Surface Book.
Lo que sucede es que estas computadoras en realidad no son dirigidas al público en general (al menos no estamos midiendo poder adquisitivo) y al no tener el sucesor del Surface Pro 4 a tiempo para este trimestre pues afectó el segmento de computación para consumidor.
El área de software sigue siendo uno de los fuerte no obstante, con las subscripciones de Office subir un 7% y un 15% respectivamente en el mercado de empresas y de cuentas de consumidor y mientras que Windows, a través de manufactureros u OEM creció un 5% y servicios un 6%.
Interesantemente, Microsoft reporta también que LinkedIn logró participar de estos ingresos con una aportación de $975 millones, pero no se especificó sui esto es perspectiva en negativo o en positivo.
A propósito, esta semana Microsoft tiene un evento donde probablemente se presente el Microsoft Surface Pro 5, la nueva Laplet que se espera, cuente con un procesador Intel Core de la generación Kaby Lake con fabricación de 14nm que permite mejor computación a menor costo de energía.
Adicional, se espera se presente también el primer Surface con Windows 10 Cloud, la respuesta al concepto de las Chromebooks de Google, donde su fuerte sea estar dependiendo más de la nube en Internet, que estar offline.
