Como ya deben saber, Samsung ha decidido cancelar la producción y venta del Galaxy Note 7, luego de que sucedieran varios incidentes en los cuales las nuevas unidades “seguras” del teléfono explotaran. Aunque aquí hemos hablado de cómo la reputación de la empresa se ha afectado, es muy difícil saber cuánto ha perdido la empresa con respecto a eso, pero sí sabemos cuánto han bajado sus acciones. Según Bloomberg, las acciones de Samsung cayeron 8% el pasado jueves, eliminado $17,000 millones de su valor en el mercado.
Sin embargo, el costo operacional de este recogido de teléfonos pudiera rondar entre $1,000 millones a $5,000 millones, un golpe a los resultados financieros de la empresa. Ya la compañía ha hecho ajustes al pronostico de sus ganancias para el próximo trimestre: espera recibir $2,300 millones menos.
Se desconoce si Samsung rescatará este equipo en algún momento durante lo que queda del año pero si la empresa quiere recuperarse, debe asegurar de que el Galaxy S8 sea un equipo excelente.