Son días fuertes internamente en Google. No porque haya crisis en AdSense, ni en Android, ni TAN SIQUIERA otra documentada falla en su red social de Google+. Se trata de un problema de moral dentro de la empleomanía de la gigante de Internet que evidentemente Sundar Pichai tiene que atacar.
Tan fuerte es la cosa con las reacciones tanto interna y externa sobre la famosa carta de pensamiento cuestionable que un empleado, ahora identificado como un software engineering asignado a Search llamado James Damore, que Sundar Pichai tuvo que cancelar sus vacaciones regresar a Google para amortiguar daños.
Este es el memo interno que Pichai emitió internamente en Google, que irónicamente, la prensa tuvo acceso a él:
From: Sundar
Subject: Our words matter
This has been a very difficult few days. I wanted to provide an update on the memo that was circulated over this past week.
First, let me say that we strongly support the right of Googlers to express themselves, and much of what was in that memo is fair to debate, regardless of whether a vast majority of Googlers disagree with it. However, portions of the memo violate our Code of Conduct and cross the line by advancing harmful gender stereotypes in our workplace. Our job is to build great products for users that make a difference in their lives. To suggest a group of our colleagues have traits that make them less biologically suited to that work is offensive and not OK. It is contrary to our basic values and our Code of Conduct, which expects “each Googler to do their utmost to create a workplace culture that is free of harassment, intimidation, bias and unlawful discrimination.”
The memo has clearly impacted our co-workers, some of whom are hurting and feel judged based on their gender. Our co-workers shouldn’t have to worry that each time they open their mouths to speak in a meeting, they have to prove that they are not like the memo states, being “agreeable” rather than “assertive,” showing a “lower stress tolerance,” or being “neurotic.”
At the same time, there are co-workers who are questioning whether they can safely express their views in the workplace (especially those with a minority viewpoint). They too feel under threat, and that is also not OK. People must feel free to express dissent. So to be clear again, many points raised in the memo — such as the portions criticizing Google’s trainings, questioning the role of ideology in the workplace, and debating whether programs for women and underserved groups are sufficiently open to all — are important topics. The author had a right to express their views on those topics — we encourage an environment in which people can do this and it remains our policy to not take action against anyone for prompting these discussions.
The past few days have been very difficult for many at the company, and we need to find a way to debate issues on which we might disagree — while doing so in line with our Code of Conduct. I’d encourage each of you to make an effort over the coming days to reach out to those who might have different perspectives from your own. I will be doing the same.
I have been on work related travel in Africa and Europe the past couple of weeks and had just started my family vacation here this week. I have decided to return tomorrow as clearly there’s a lot more to discuss as a group — including how we create a more inclusive environment for all.
So please join me, along with members of the leadership team at a town hall on Thursday. Check your calendar soon for details.
— Sundar
Aunque inicialmente no se había dicho que acciones tomó la alta jerarquía de Google, pero el mismo James Damore, se identificó en la prensa y afirmo que Google lo despidió por causar ambiente hostil en el ambiente de trabajo, tratando de traer una noción de estereotipo y este dio a entrever que no se quedará dado y busca sus opciones legales para cuestionar su despido, el cual lo interpreta como una censura.
Ya se ha escuchado que Google, evita siempre tener que recurrir al despido de un empleado, pero la gigante de Internet es conocida por su casi NULA tolerancia a la violación del Código de Conducta para sus empleados ya que muchas reglas que se rompen terminan en despidos.
La Derecha aparentemente no está contenta pero irónicamente, WikiLeaks tampoco
Es cierto que el contenido de ese correo interno habla de manera despectiva de las capacidades de la mujer y su rol dentro del mundo tecnológico.
Pero no hay que negar que dentro del ala conservador de la humanidad, hay personas que realmente entienden que son también prejuiciados y han considerado la movida de Google como una fascista y que la empresa se ha contradicho de su política de libertad de expresión.
Un grupo inusualmente también está metiendo la cuchara y se trata de WikiLeaks, quienes no solamente confirmaron que James Damore es en efecto, el autor de la polémica carta interna, sino que están ofreciéndole empleo a Damore y obviamente liderando las reacciones negativas en contra de Google.
1/ Censorship is for losers. @WikiLeaks is offering a job to fired Google engineer James Damore. https://t.co/tmrflE72p3
— Defend Assange Campaign (@DefendAssange) August 8, 2017
El líder de WikiLeaks, Julian Assange, ya es conocido por su poca amistad que tiene hacia Google y aunque su organismo defiende la apertura y la libertad de expresión, se le ha conocido de tener algunas agendas y de interpretar cuando una censura es plausible o no.
Su polarizante punto de vista ha generado algunas peleas internas en WikiLeaks, lo que provocó salidas de alto rango del grupo como Laura Poitras, responsable de ser una de las personas que Edward Snowden contactó para cuando huía de la NSA y actualmente detractora de Assange.
En definitiva, esto es un debate que Google no podrá escapar, máxime cuando ya la empresa estaba en un torbellino legal por el mismo tema de la diversidad y es probable que sea su nuevo sucio difícil por lo frágil que puede ser tratar de mantener emociones en este tipo de temas.