Mientras Estados Unidos velan con recelos esta histórica visita, lo cierto es que Corea Del Norte tiene a un invitado de gran importancia a nivel empresarial de occidente.
Eric Schmidt, actual CEO de Google, ya se encuentra en estos momentos en suelo norcoreano en una visita para adelantar conversaciones sobre asistiendo a Corea Del Norte con su infraestructura de Internet y la potencial apertura del país a las redes sociales.
A pesar de no ser una visita como tal de Google, Schmidt cree oportuno las conversaciones para lograr que Corea Del Norte suavice un poco sus fuertes restricciones con el Internet donde se creé que menos del 17% de la población pudiente del país asiático cuenta con acceso al Internet.
Por otro lado, el Departamento de Estado americano han criticado el viaje de cuatro días justamente luego que Corea del Norte lanzó un satélite al espacio el 12 de diciembre mediante un cohete de largo alcance. Washington condenó el lanzamiento, por considerarlo una prueba de su tecnología de misiles, y dijo que una violación a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que prohibía a Pyongyang desarrollar su programa nuclear y de misiles. El Consejo de Seguridad aún delibera si tomará medidas al respecto.
Pero ello no detuvo la visita ya que de igual forma estaba ya tomada la decisión de parte de Schmidt y al ser viaje privado, no está necesariamente restringido por Estados Unidos pero el gobierno federal entiende que el viajes es inoportuno.