La primera duda que sembró Apple en la cabeza de todos era si Face ID sería tan efectivo y eficiente en el diario vivir, como lo era el Touch ID. El reto era grande, pero la duda si se fijan no se trataba de seguridad, sino de funcionalidad. Luego nos topamos con la duda de la seguridad, vimos sí gemelos podrían hacerse pasar el uno por el otro, los cambios de rostro con barba, sin barba y hasta las máscaras hechas por profesionales. Hoy nos topamos con un video donde un niño de 10 años, ha logrado engañar al Face ID del iPhone X de su mamá.
Según Apple, las probabilidades de que esto suceda son 1 en un millón. El número de Touch ID sin embargo, era de 1 en 50,000, lo que significa que era un rate un poco más alto versus el número proporcionado de Face ID. Lo que sucede es que el rate de confusión aumenta cuando se trata de gemelos, parientes parecidos y más cuando son menores de 13 años. Apple así lo deja claro, lo cual no sorprende el resultado del video.
De todos modos, Face ID ha sido un éxito en mi caso, aunque reconozco que puede mejorar dramáticamente con el pasar de los años.
