Se acabó lo que se daba para el reconocido empresario y potencial futuro líder de la conglomerada Samsung y es que autoridades en Corea Del Sur fueron adelante con su arresto.
Luego que se salvara de un primer intento, una corte surcoreana acepto la solicitud de investigadores en poner bajo arresto a Jay Y. Lee y no se perdió el tiempo de ejecutar la orden.
Se cree que Lee pagó al ex Presidente Park Geun-hye para facilitar la fusión de dos negocios menores a favor de Samsung que, a su vez, ayudaron a facilitar el camino para la sucesión de Lee dentro de la conglomerada de electrónicos y semiconductores.
Esto es parte de una serie de movidas consideradas como corrupción gubernamental en las que el antiguo mandatario fue participe.
En un comunicado y verse de manera neutral, Samsung indicó que estarán en pro de hacer las movidas pertinentes para que la verdad salga a la luz, esto en tono de no irse en contra de las autoridades pero tampoco de minimizarse como ente involucrada.
Todavía no tomaba su puesto y tampoco emitió órdenes económicamente hablando en Samsung, pero se rumora fuertemente que ya Lee estaba moviendo fichas administrativamente en la empresa y que estuvieran listas para cuando le tocara sentarse en la silla de “líder”.