La publicidad es totalmente necesaria, de hecho, muchos blogs (incluido nosotros) también subsistimos gracias a lo que la publicidad cruzada nos pueda permitir. Pero como todo, hay sus límites y al parecer, una empresa ha provocado que se considere una ley que faculte a la FCC de permitir publicidad enviada por voicemail.
El Comité Nacional Republicano espera que la FCC apruebe una solicitud de una firma dedicada al mercadeo que permita a las empresas y organizaciones enviar mensajes de forma silenciosa directamente a las bandejas de entrada del buzón de voz de los consumidores.
Tales mensajes de voicemail pueden ser mensajes políticos pregrabados o incluso anuncios y la llamada idea de “buzón de voz sin timbre” ha estado ya desde hace algunos meses en la agenda de la agencia federal, cuando una firma de marketing llamada All About the Message LLC pidió a la agencia que aprobara su tecnología.
El truco de esto, mientras la gente busca y exige a las empresas respetar privacidad y no ser cundidos de anuncios, es que a diferencia de llamadas automatizadas, publicidad por voicemail no se considera llamada, pues es simplemente dejar el mensaje sin que el teléfono suene ni llamará inmediatamente la atención del usuario, pues no activará el ringtone, solo la alarma de mensajes.
Además, la firma argumenta que no interrumpirá a los consumidores con llamadas telefónicas automáticas, robotizadas o las molestosas llamadas que se quedan al aire en momentos incómodos.
Si te incomoda leer esto, pues tienes otra razón para estarlo, ya que se sabe que El Comité Nacional Republicano está convencido del concepto y prefiere que sea aprobado, puesto que ellos mismos pueden ser también clientes con campañas públicas y políticas con el argumento que respetaría la Primera Enmienda de la Constitución.
Ahora, watchdogs o grupos verificando y salvaguardando los derechos de los consumidores, entiende que la movida pudiera ser un tapete para precisamente lo que se mencionó anteriormente, que son una nueva práctica de llamadas robotizadas, pues aunque no sea técnicamente una llamada, es una distracción más para el cliente y sobre todo, no habría necesariamente el control de evitarlos.
Esta movida, se cree que es la culpable de que los teléfonos tradicionales de casa están siendo abandonados con fuerte adopción de celulares y Smartphones.