Apple siempre ha trabajado para hacer todo más delgado y más liviano que nunca. Esta vez con el iPhone 6s, no le salió la jugada y tuvieron que engordar un poco el equipo, por lo que él mismo ya no pesara lo mismo, sino que pesara más.
Aunque por fuera parecen prácticamente idénticos, por dentro ambos equipos son totalmente diferentes. Es que desde el botón de Touch ID, hasta la pantalla, todo es diferente excepto los botones de manejar el volumen y el puerto Lightning de cargar el celular. Touch ID de segunda generación, pantalla con tecnología 3D Touch, mejor procesador, 2GB de RAM, batería más pequeña, en fin, un equipo totalmente diferente.
“La culpa no es del nuevo aluminio serie 7000”
Analizando todo esto, rápidamente nos imaginamos que pesaran lo mismo. Pero este no es el caso, el iPhone 6s y el iPhone 6s Plus, pesarán un poco más que sus predecesores. Pero no tiene que ver todo con el aluminio serie-7000. Más bien el peso se le adjudica a la nueva pantalla. Esta pantalla ahora pesa poco más del doble de lo que pesaba la pantalla del iPhone 6. La pantalla del modelo anterior, pesaba solo 12 gramos, la pantalla del iPhone 6s con 3D Touch pesara 29 gramos.
Si observan la gráfica, todo pesa un chispo más, pero se le adjudica el peso a la pantalla en general por la gran discrepancia entre un modelo y el otro. Claro, esto no va a cambiar nada en cuestión del día tras día. Te lo puedes poner en los bolsillos y no se te caerán los pantalones, tampoco es que pesara suficiente como para notarlo en todo momento. El iPhone 6s y iPhone 6s Plus pesaran solo 14 y 20 gramos respectivamente.
Para nosotros los geeks, es siempre bueno saber el por que de los cambios y conocer más sobre los equipos que tenemos.
Fuente: TheVerge