En el mercado de la telefonía móvil la competencia es voraz. Los fabricantes no paran de innovar para diseñar nuevos celulares con los que sorprender al resto de marcas y conquistar a los usuarios. La compañía surcoreana Samsung sabe muy bien cómo se juega a este juego. De hecho, puede presumir de ser la marca líder en el mercado de teléfonos Android. Pero LG tampoco se queda atrás. De hecho, es uno de sus principales competidores y los últimos teléfonos que ha diseñado han sido un acierto. Hay quienes piensan que LG podría desafiar la actual posición de Samsung en el mercado.
Si analizamos la gama alta, la batalla por el mejor puesto entre Samsung y LG se centra en dos modelos: el Galaxy S8 y el LG G6. Con el primero, la marca surcoreana apuesta por los celulares de gran pantalla y con márgenes estrechos para aprovechar al máximo el frontal y poder ver contenidos de alta calidad y HDR10 de alto rango dinámico. Con 5,8 pulgadas, dispone de 4 GB de RAM, 64 GB de almacenamiento, un procesador más que potente y además es el primer teléfono que incluye Bluetooth 5.0.
¿Cómo le hace frente LG? Con el nuevo LG G6, un celular que llega con una pantalla en modo phablet. Destaca también por las cámaras, de 5 megapíxeles la frontal y de 13 la de atrás, por su diseño manejable, resistente al agua y al polvo, y por su hardware. Con un procesador Snapdragon 821, 4GB de RAM y la versión Android 7.1, podrás descargarte todas las apps que necesites. Además, el precio del LG G6 también es muy interesante. En operadoras como T-Mobile podrás conocer el precio del LG G6 además de atractivos planes y numerosos complementos para sacarle el máximo partido. Si lo comparas con otros modelos, verás como el LG G6 gana posiciones.
En cuanto a la gama media, el buque insignia de Samsung es el A5, con 5,2 pulgadas, 2 GB de RAM, 16 GB de almacenamiento, lector de huellas y carga rápida. Por su parte, LG compite con el modelo LG K20, con 5,3 pulgadas y también 2 GB de RAM y 16 GB de almacenamiento, ampliables con tarjeta microSD.
Si nos fijamos en la gama baja, los surcoreanos apuestan por el Galaxy J5, con procesador Snapdragon 410, 5,2 pulgadas, 2 GB de RAM y 16 GB de almacenamiento, mientras que LG ofrece el LG K7, con una pantalla de 5 pulgadas y resolución a FWVGA. El hardware se compone de un procesador de cuatro núcleos a 1.1 o 1.3 GHz, RAM de 1.5 ó 1 GB y almacenamiento de 16 ó 8 GB.
Son solo tres ejemplos de los muchos modelos que tiene LG para competir contra Samsung. ¿Será capaz esta compañía de arrebatar el liderazgo de Android a Samsung? Lo cierto es que cada vez diseñan celulares más interesantes. Además, los surcoreanos tienen otros problemas. Y es que hay más fabricantes como Huawei o HTC que también quieren entrar en la lucha por el pódium.
