Aunque la seguridad biométrica o tener acceso a un equipo por tus huellas dactilares o reconocimiento facial o por ojos realmente NO es nuevo pero lleva ya por su tercer a cuarto año en el mundo móvil.
Pero como toda plataforma, su popularidad, la accesibilidad a desarrollar, aprender en hacerlo y con el pasar del tiempo, se ha hecho claro lo inevitable, las trampas para engañar dispositivos con esos sensores ya está viento en popa.
Según un informe de la IEEE, quienes determinan y recomienda los estándares de la industria de la ingeniería eléctrica, electrónica y computación, indica que ya hay la posibilidad que en cualquier momento software dedicado a engañar los sistemas de seguridad biométrica pudieran estar pronto a la vuelta de la esquina.
Basándose en un estudio de la Universidad de Nueva York y la Universidad de Michigan, se han hecho simulaciones donde se intenta coleccionar posibilidades de toques para crear una huella llamada “Masterprint”, la que se afirma que pueda ser la huella “por defecto” del usuario, se ha llegado a simular con 65% de éxito en engañar a los sensores.
Aunque tiene una ventana abierta a errores, 65% en mi opinión es un trampolín para que se siga intentando minimizar los errores.
Se reconoció que los simuladores no incluyeron Smartphones actuales y aunque suene bonito que en el mundo real todavía no sería posible tener una herramienta decente, pero lo malo es que NO es imposible que se proliferen y con el denominador común de que las huellas dactilares es lo único que físicamente es difícil de copiar, pero, engañar a los sensores de huellas se volverán el blanco.
Obviamente, esto no detendrá los desarrollos que nuestras empresas manufactureras favoritas ya han emprendido, pero nuestra recomendación es tenerle contraseña como segunda seguridad para evitar tener que lamentar.