Hoy en la mañana compartimos con ustedes la primera imagen del nuevo teléfono de LG, el G6 pero ayer, Forbes publicó un interesante reporte explicando porqué este teléfono no llegará con el nuevo procesador de Qualcomm, el Snapdragon 835. Resulta ser que Samsung ha logrado obtener cierta exclusividad con este procesador, ya que el mismo será utilizado solo por Samsung en el Galaxy S8 en la primera mitad del año.
Una vez el Galaxy S8 llegue al mercado, entonces los demás fabricantes podrán utilizarlos, ya que al parecer Samsung ha comprado todos los procesadores que fabricará Qualcomm en los primeros meses del 2017. Esto significa que teléfonos de la competencia, como el G6 y el nuevo HTC U Ultra, no tendrán lo nuevo de Qualcomm y se tendrán que conformar con el procesador del año pasado, el Snapdragon 821.
Es cierto que Samsung es un socio de Qualcomm y más aún este año cuando la compañía está utilizando el sistema de manufactura de 10nm de la surcoreana, pero esto pone a la industria en una posición incómoda. Qualcomm está jugando un poco sucio -y un poco anti-competitivo- ya que está dándole la exclusividad de un producto a una sola compañía. Ya esta empresa está en batallas legales con Apple con respecto a patentes así que veremos a ver qué pasa ahora.
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